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domingo, 3 de octubre de 2010

Otoño emocional

La primera imagen de otoño que viene a mi cabeza es de hace ya unos años, en el patio del colegio. Las hojas caían entre decenas de niños jugando al balón, a correr o simplemente hablando en un banco e intercambiando cromos.... El viento me trae ese inconfundible olor a plastidecor mezclado con el sudor ya frío de los niños que corren. Se mezcla en mi mente con el sonido de la campana, es hora de comer, a ninguno de los niños que estamos aquí nos gusta esa comida, pero estar calentito en el comedor escolar, junto a tus amigos, importa más.
Rápidamente una ráfaga de viento me lleva un poco más adelante en el tiempo, estamos en el recreo, ya somos mayores, tenemos toda la vida por delante y miramos a los niños más pequeños con desprecio. Nadie piensa que hace unos años fuéramos así. Esta imagen viene acompañada de olor a tierra mojada, a lluvia. Hoy ha llovido, me he manchado los bajos de los pantalones, mi madre me castigará. ¡Qué irónico! Ya no soy un niño pero todavía tengo que obedecer a mis padres, en cuanto cumpla la mayoría esto ya no será así.
Me ha llamado, ella, mi sueño hecho realidad, quiere verme, pero todavía estoy castigado. Me escapo. Consigo verla y hablamos, nuestro primer beso, sin duda un beso mágico en otoño, rodeados de árboles que nos arropan con sus hojas ya marrones, el viento, sin embargo, nos intenta separar, no lo consigue y no lo conseguirá nunca, somos invencibles.
Eso solo duró unos meses, el verano se lo llevó, menudo verano me espera.
Vuelvo a abrir los ojos y ya es otoño de nuevo, ahora empiezan los mejores años de mi vida, la universidad. Nueva ciudad, nueva gente, nuevo ambiente, me encuentro solo, pero el otoño trae amigos, los amigos de clase, los de la residendia... Parecen venidos con las hojas, arrastrados por el viento. Unos, tal y como vinieron, al igual que hacen las hojas, se van. Otros se quedan.
Mil y una aventuras me han traido estos otoños felices. Ahora, sin embargo, toca madurar. El otoño ya no me traerá momentos así, tengo mujer e una hija. Las adoro. ¡Cómo ha pasado el tiempo! Ahora me encuentro en otoño, sí, mi estación favorita, pero haciendo algo que no esperaba hacer tan pronto, comprando material escolar para mi hija, ella lo elije, la llevo al colegio mientras recuerdo cuando tenía su edad. Ahora, a parte de seguir construyendo nuevas emociones y sensaciones otoñales, estoy creando unas para mi hija. ¿Puede ser algo más bonito que este ciclo? ¿Qué pensará cuando sea mayor? Quiero que recuerde todos los otoños como yo he recordado los mios.
Probablemente dentro de unos años no los recordaré. Me hago mayor, mi hija ya ha cumplido 18 años, se va de la ciudad, a estudiar. Seguiré creando otoños con mi mujer, sin embargo, este otoño huele a soledad y suena a tristeza.
Después de todos estos años puedo estar satisfecho de todo lo que he hecho. He vivido ya 90 otoños, no me acuerdo ya de la mitad de ellos, pero eso no me preocupa. No me preocupa porque sé, que la mayoría, son felices, es más, solo recuerdo los felices. Porque al final, lo triste, se olvida. Yo iré olvidando todos los otoños por una maldita enfermedad, sin embargo, espero que mi familia me los siga recordando. En el fondo sabré que he sido feliz, que tantos otoños han valido la pena.
Jorge Bafalluy Giral, 2010.

jueves, 8 de julio de 2010

miércoles, 5 de mayo de 2010

Sofronia contro Rasputin

Quindi Rasputin disse: - Sofronia, io parto domani per paesi lontani, il Gargakistan o la Brakulia. Vuoi venire con me?
Sofronia rispose: - Sei un gran bel tipo e hai un bel mattarello, ma io non sono fatta per i viaggi, sono una pianta da erbario. Resterò qui.
- Capisco, - disse Rasputin - nel mondo c'è chi sta fermo e chi cammina.
- Sì. E c'è chi cammina ma non vede mai niente, e chi sta fermo ma vede tutto quello che sta intorno - rispose lei.

(Pane e tempesta) Stefano Benni.


En el mundo hay quien camina pero no ve nada, y quien está quieto pero ve todo lo que está a su alrededor...

martes, 23 de marzo de 2010

Feliz Cumpleaños... Mañana toca volver a la realidad.

Sin duda ahora podría escribir el texto más alegre que pudiera haber escrito en mucho tiempo. Ha sido un día muy grande...
Ya comenzamos ayer con una buena rave con vecinos quejicas, pero bueno. Hoy he parado el ritmo y disfrutado del día como hace mucho tiempo que no hacía.
Aunque mañana toque volver a la realidad yo me quedo con el recuerdo.
Gracias por todas las felicitaciones, de conocidos, de amigos, de más que amigos...
Uno de los regalos más especiales y que surgen de la nada, puede que del destino, de la casualidad, o de la vida, conocer a Pilar Rubio, aunque también a Salomé Jiménez, Norma Ruiz, y Miguel Ángel Muñoz y Lamata... Me han convencido para ver su película.
Otro regalo, que ha causado sensación, el de mi madre, que siempre se acuerda de un detalle, de algo especial, algo simple que te recuerda que te quieren.
Por último, la fiesta sorpresa, que de verdad ni me la imaginaba, y me habéis sorprendido. Muchas gracias, de verdad.
Habéis hecho que sea un día de verdad especial.

lunes, 22 de marzo de 2010

Orgías asesinas

Esto ocurrió hace tres años, en mi 20º aniversario. Mi nombre es Miguel.
Todo comenzó el día de mi cumpleaños, Sofía me dijo que tenía una sorpresa para mí. Ella, hasta entonces, era mi novia, y digo hasta entonces porque a partir de ese día, aquel 22 de marzo de 2010, mi vida cambió.
Fuimos a su casa, su sorpresa era sexual, una orgía ni más ni menos.
Cariño, he descubierto una nueva web en internet donde la gente puede hablar y quedar en grupo para hacer el amor, me dijo.
Yo quedé sorprendido, Sofía era lo más parecido a una monja que me había echado por novia...
Me daba vergüenza decírtelo, pero, verás, siempre me ha llamado la atención el sexo en grupo, desinhibirte con un poquito de vodka y pasarlo bien.
Esta tía va drogada, es lo primero que pensé, o quizás se trata de una broma, ahora me dirá que era broma. Sí, está a punto, va a decírmelo ya.
Miguel, ¿no te parece bien, cariño? Sé que es una locura, pero... ¿no te apetece?
Lo primero que pensé fue que al fin me la tiraría, sí, es una locura, pero es la forma más rápida de hacer el amor con ella, y practicar sexo con otras. Porque hay que distinguir entre hacer el amor y practicar sexo, es muy diferente. Un momento, ella me ha dicho hacer el amor... ¿estará enamorada de los que haya conocido en ese chat? Mierda, una orgía, también habrá tíos. Cosas mal.
No sabía qué hacer... Estaba confundido. Sofía se volvió loca, un poquito de vodka y a desinhibirse... No es ella... No puede ser ella.
Al principio me lo tomé mal, me cabreé. Le dejé de hablar. Cortamos. Huí.
Yo... En realidad, no me podía ni imaginar qué sucedería más tarde...
Cuando usted me llamó la primera vez, diciéndome que el cuerpo de Sofía había sido encontrado sin vida en aquel río no me lo podía creer. Hay que ver, ¿cómo ha podido pasar? Ella no era así...
Lo pasé mal, y todavía la echo de menos, pero decidí investigar, necesitaba saber quién y porqué le había hecho eso...
Contacté con esa web y creé un perfil, al poco tiempo me incluían en conversaciones múltiples, pero eso no servía de nada, mucha gente y ninguna pista. Hablé con todos, me dio la sensación de que eran personas salidas, con ganas de sexo, sin más. No avanzaba.
Me creé un nuevo perfil, Isabel, creé una persona similar a Sofía, misma edad, misma ciudad, características físicas, sun duda pasaría por su hermana gemela, al menos descrita.
Me habló un contacto con el que había hablado anteriormente, Tigre23, así se hacía llamar.
Tras los típicos datos de físico y medidas, me dijo que era perfecta para una orgía que llevaba en mente, cinco tíos, cuatro tías más, con Isa cinco. ¿A qué jugaba? No lo sé, todavía hoy no lo entiendo.
El caso es que insistía mucho, pero mi única intención era saber quién le había hecho eso a Sofía. Le pregunté si era la primera vez que lo hacía.
Nena, soy un experto, vamos, vente, lo pasaremos bien.
Era la misma respuesta, en todos los intentos, en todos los días.
No sabía hacia dónde andar. Estaba perdido. ¿Cómo podía saber con quién quedó Sofía la noche de su muerte?
Tengo una idea, tengo que conocer su contraseña, entrar en la web como Sofía, alguien seguro que se sorprende. ¿Cuál será? ¿Su cumpleaños? No, son letras... ¿su nombre? ¿sus apellidos? Tampoco. Al fin encontré la correcta, nuestros nombres, miguelysofia. Entré.
Cómo no, este le tira la caña a todas, otra vez Tigre23, qué pesado. Pero... Él no puede ser, me habla como si no la conociera, él no puede ser.
¿A quién tiene Sofía como amigos? Solo aparece uno, Boy_21. Se ha desconectado. Lástima, podría haber sacado información de él. No se conectó durante el resto de la semana, yo estaba las 24 horas pendiente de la pantalla, pero nada.
Entonces es cuando tuve la brillante idea, no sé si fue brillante o no, pero la tuve. Volví al perfil de Isabel, y busqué a Boy_21.
Hola, ¿cómo estás?
Cuatro tonterías y lo tenía detrás, qué fáciles somos los tíos, me di cuenta entonces. Nos dicen dos guarradas y vamos detrás de ellas como perros hambrientos.
Tenía que sacar información, como fuera, sí, está mal, lo sé, se llama suplantación de identidad, pero en ese momento ni lo pensé ni me hubiera importado. Conseguí fotos de una tía que la verdad, no estaba mal del todo, y comencé a tramar mi plan. Con fotos es mejor, más verosimil.
Eres muy guapa, justo la chica que busco para el sábado, he quedado con tres amigos, ¿quieres pasarlo bien?
Si, por supuesto, me encantaría, pero ¿dónde quedamos?
Podemos quedar en mi casa, vivo solo, junto al río, es una calle discreta, a la margen izquierda.
Genial Boy_21, pero... ¿me dices tu nombre? No querrás que el sábado te llame Boy_21...
Alberto.
Tenía que ir de alguna manera, Isabel no existe pensé, pero yo tengo que ir y asegurarme de que ese cabrón no es el asesino de Sofía. Pero, ¿qué hago? Estoy loco, ¿cuál es el plan? Me presento allí, como quien no quiere la cosa, a preguntar si es el culpable? La policía, ustedes, ya habían investigado la zona, sin encontrar nada, ni rastros en el cuerpo. Nada. Ni arañazos, ni moratones, ni adn... Nada en absoluto.
Decidí ir.
Llegué, pero no me abrieron la puerta, ¿realmente no había nadie en casa? Imposible, era la hora y el lugar. Oía una respiración tras la mirilla. Me quedé esperando en el portal.
Vienen tres chicos, me voy a esconder. Sí, detrás del coche es poco probable que me vean. Oigo sus voces.
Joder macho, espero que Alberto no se vuelva loco como hace unos días, ¿sabéis la que me lió? Se la cargó antes de follar, qué cabrón que es, no le gusta compartir, la faena sucia sí, ¿sabes? Pero aquí solo folla él... Como hoy haga lo mismo me lo cargo después a él.
Eh, vosotros... Hola, esto... Mi nombre es Miguel, mira, quería preguntaros algo...
No recuerdo más. Solo el agua en mi cabeza, inundándome el cuerpo, hundiéndome, algo me tiraba de los tobillos hacia abajo. Me volví a dormir.
Desperté en el hospital, rodeado de policías, vuestros compañeros. Me habían encontrado en el río, medio muerto. Investigaron sobre mí, registraron mi ordenador, y finalmente estoy aquí, por suplantación de identidad, encontraron a la chica de las fotos, la tal Isabel, la muy zorra resultó ser la hija de su superior, y lo más grave...
En todo este tiempo nadie ha seguido investigando la muerte de Sofía, sin embargo, yo tengo que asumir una multa si no quiero ingresar en prisión, por suplantación de identidad.
¿Les parece justo? Estoy seguro de que fueron ellos, uno se llamaba Alberto, les he dicho dónde vive, incluso su perfil de la maldita web, pero ustedes no me creen, es mucho más grave para ustedes el coger unas cuantas fotos de una tía cualquiera de la red. Lo sé, estuvo mal, pero como a veces, en esta vida, cuando has perdido algo importante como fue Sofía, lo demás te importa una mierda. Incluso cumplir años, ¿qué regalo puede haber mejor que la detención de los culpables? Nada, como siempre, y como nunca hubo aquí, nada.




Bueno, este "relato" por llamarlo de alguna manera es una mierda improvisada en 20 minutos, los que me ha costado teclear las palabras, simplemente, he cumlido mi palabra, el título era Orgías asesinas, creo que el tema está claro, he hecho un relato a partir del título que me habéis dicho... He cumplido... Muahahaha xD
El objetivo es echarse unas risas, de hecho, lo he hecho con esa intención, con aspectos que os sonarán familiares, como la suplantación de Isabel, jajaja.
Saludos!

jueves, 21 de enero de 2010

Verano del '96

Era una cálida noche del verano del 96. Eva y Lucía paseaban por la ciudad. No se conocían, ambas recorrían las grandes avenidas de Madrid. Eva contaba con apenas 20 años, Lucía tenía uno menos.
Mientras la primera paseaba con su novio, Lucía lo hacía sola. Sola porque no tenía a nadie, acababa de dejar a su novio porque había decidido, por fin, contar la verdad. Ella se sentía lesbiana, le gustaban las mujeres, había decidido dar este paso tras varios años ya de incertidumbre. Su novio, sin embargo, no se lo tomó demasiado bien. La golpeó hasta que sus labios sangraron y una lágrima se deslizara por su mejilla. Lucía no sabía por qué. No entendía ese odio hacia la homosexualidad que respiraba en su ambiente, entre sus amigos, incluso en su propia familia. Jamás pensó en contarles sus inclinaciones a sus padres, católicos, que no entenderían nunca su situación.
Eva, en principio, se consideraba bisexual, y su novio lo sabía, lo aceptaba y lo respetaba. Su relación iba perfectamente hasta aquella noche. Ambos se sentaron en una pequeña plaza, cerca de una fuente. Él le confesó que había estado con otra chica hace unas semanas. Eva no se lo tomó nada bien. Tras varios reproches, él dijo que ella no tenía derecho a recriminarle nada ya que era una zorra a la que le iba todo. Pues si a ella le iba todo, él tenía derecho a acostarse con quien quiera. Eva comenzó a llorar desesperadamente, y es que en verdad, estaba muy enamorada. A él no se le pasó por la cabeza ni una sola vez que lo que había hecho no era lo correcto. Se marchó.
Lucía llegó a una plaza apartada de la luz, de la gente. Encontró a una muchacha llorando, sentada cerca de una fuente. Se acercó hacia ella y le preguntó si la podía ayudar. Eva la miró, y al ver la triste mirada de Lucía se deprimió todavía más. No la conocía de nada pero aceptó su compañía, ambas compartieron sus problemas y contaron sus historias. Tras llegar a la conclusión de que los hombres eran unos asquerosos, saltó la primera sonrisa. Decidieron comprarse un helado, pues hacía mucho calor en pleno agosto.
Pasearon por el Retiro, conociéndose, compartiendo experiencias, pensamientos y miradas. Era tarde, las dos de la mañana, Eva se tenía que ir, sus padres estarían preocupados. Al tiempo de despedirse, Lucía pensó que no podría desaprovechar la oportunidad de pedirle su teléfono, quedarían otro día para seguir hablando de ellas, de ellos, y de las muchas cosas que tenían en común. Eva se despidió con un beso en la mejilla y se fue.
Pasaron horas, días y semanas, Lucía pensaba que aquello era una locura, no la conocía de nada, pero decidió llamar a Eva para tomar un café. Ésta aceptó, tras unos minutos hablando, Lucía le contó porqué había terminado con su novio. Eva sonrió. “No sé qué te hace tanta gracia, el muy cabrón me pegó una paliza cuando se lo dije. Lo odio, lo odio con todas mis fuerzas.” “Ja ja ja, tranquila, tranquila, no te pongas así, me río porque me siento identificada contigo. Soy bisexual, y en cierto modo, terminé con el mío por el mismo motivo. Él pensaba que como yo soy bisexual, él podía acostarse con cualquiera que le diera la gana. Como si por ser bisexual o lesbiana tengamos que ser promiscuas… ¡Me pone enferma!”
Sus miradas se entrelazaban, se cruzaban y se enredaban. Había nacido algo entre las dos, algo más fuerte que una amistad. Por fin, se besaron.
Y es que en esta vida para el amor no importan las barreras, los estereotipos, la condición sexual de cada persona, ni convencionalismos.
Tras unos meses de relación clandestina, decidieron dejarlo todo e irse juntas a otro lugar, da igual dónde, solo sabían que se amaban, que ya nada importaría más que ellas dos, que disfrutarían del amor todo lo posible.

domingo, 17 de enero de 2010

¿Realmente Irene tendrá pene?

Como cada año, tras el gran chiki chiki, cientos de pseudocantantes con pseudocanciones expresan su deseo de participar en la gran gala internacional de la que muchos se ríen y en la que otros confían; por cierto, este año a mi parecer más pronto que otras veces, pues estamos en enero y el festival es en mayo... Sí, hablo de Eurovisión, ese concursillo que no vamos a ganar ni aunque llevemos a Massiel o a Manolo el del Bombo. ¿Qué hacemos mal? ¿Qué nos falta? Eso es lo que se pregunta la mayoría de españolitos. Quizá lo más prudente sería no participar en Eurovisión, como hace Italia desde hace unos cuantos años. Nos ahorraríamos infinidad de canciones post-chiki-chiki como Irene tiene pene, a la fantástica Malena, que año tras año lo vuelve a intentar, pero también nos evitaríamos malgastar artistas de la talla triunfito de OT que creen (¿realmente creen o solo buscan fama?) en el festival de la canción, siendo este, el que dé con su carrera musical en el suelo, pues es bien conocido que nadie se ha hecho famoso por participar en el festival europeo. Europeo por llamarlo de alguna manera, porque por participar, ahí viene hasta el apuntador. Que yo sepa, Europa está formada por 27 países hoy en día, luego el resto de los participantes ¿de dónde salen? Si seguimos avanzando a este ritmo hacia el este, vamos a llegar a un punto en el que China y Japón también participarán. Si nos descuidamos, de tanto que avanzaremos hacia oriente, daremos la vuelta al mundo e incluso EE.UU. querrá participar. En fin, que tras este párrafo inmerecido, lo sé pero estoy cansado de estudiar y hace días que viene a mi mente la famosa Irene que tiene pene, pongo el video de Youtube con el exitazo del momento. Es más, os pongo la otra canción de este artistazo (sí, solo tiene dos, ¿qué pasa? Madonna empezó así... ¬¬). La otra canción se llama Tócame el Windous (nótese que se ha empleado la palabra windOUS y no windOWS, problemas legales y de plagio, supongo).

sábado, 16 de enero de 2010

Mi enfermedad, Pereza.


Estoy vencido porque el mundo
Me hizo así, no puedo cambiar
Soy el remedio sin receta
Y tu amor mi enfermedad.

Estoy vencido porque el cuerpo
De los dos es mi debilidad
Esta ves el dolor, va a terminar.

Parece que la fiesta terminó
Perdidos en el túnel del amor
Y dicen las hojas del libro que más leo yo
Esta vez el esclavo se escapó.

Me entrego al vino, porque el mundo
Me hizo así, no puedo cambiar
Soy el remedio, sin receta
Y tu amor, mi enfermedad.

Estoy vencido, porque el cuerpo
De los dos, es mi debilidad
Esta vez, el dolor va a terminar.

De nuestro árbol, una hoja se cayó
Y muy loca, la manzana
Se pudrió.

Tendrías que aprender a pedir
Perdón, esta vez la cadena
Se rompió.

Estoy vencido porque el mundo
Me hizo así, no puedo cambiar
Soy el remedio sin receta
Y tu amor mi enfermedad.

Estoy vencido porque el cuerpo
De los dos, es mi debilidad
Esta vez el dolor va a terminar.

Tendrías que aprender a pedir perdón
Esta vez el dolor va a terminar
Esta vez el dolor va a terminar
Esta vez el dolor va a terminar...